Estos programas funcionan como servidores FTP. Por esta razón, los cibercriminales los incluyen en los paquetes de programas maliciosos con el fin de infiltrarse en un equipo que tenga instalado un servidor FTP. Sin embargo, estos programas no son maliciosos.
Si un usuario ha instalado un programa de este tipo en su computadora o si éste fue instalado por un administrador, entonces no representa ninguna amenaza.